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Magazine dedicado a la difusión de todo tipo de contenidos culturales; música, moda, arte y cine entendiendo cada una de estas disciplinas como una representación de las diferentes vías de expresión de la capacidad interior de múltiples personalidades

JOSH ROUSE: CENTRO NIEMEYER (AVILÉS)

30 de abril 2014

Con la iniciativa “We used to party” del sello discográfico Houston Party, Josh Rouse aterrizó en el centro Niemeyer el pasado 30 de abril para revisitar al completo el álbum debut de uno de los pioneros del rock alternativo: Violent Femmes.

Josh apareció puntual sobre el escenario de la sala Club. Acompañado de su inseparable sombrero vacacional y de su banda, The Long Vacations (Xema Fuertes y Cayo Bellveser), abrió la velada, sin más dilaciones, con los míticos acordes del “Blister in the sun”.

 

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Con un bajo acústico de cadencia groove bien afilada y unas percusiones de métricas aceleradas (caja y charles), Josh y los suyos fueron metiendo al público en harina desde los primeros momentos de la noche. Y así, con casi riguroso orden de disco, siguieron con la rockandrollera “Kiss off”, destilaron reggae con “Please do not go” e hicieron agitar nuestras cabezas con la rebeldía punk-rock del “Add it up”. 

 

Para “Gone daddy gone”, Xema cambió las escobillas por el xilófono y les acompañó en el escenario Marcos Junquera (A veces Ciclón) el cual tomó las riendas de la percusión.  El de Nebraska también tuvo oportunidad de sacar a relucir su característica melosidad en “Good feeling”, la cual sepultó en cierta manera la rabia y el desgarro original de uno de los siguientes temas: “Confessions”. Entonces Josh se desprendió de su guitarra acústica y demostró su dominio de las tormentas eléctricas con la última parte del disco. Así sonaron más encarnizadas canciones como “To the kill” o “Prove my love” con las cuales clausuraron la primera parte del concierto.

Tras el pequeño descanso, abandonaron a Violent Femmes y nos deleitaron con temas propios desde un lado más eléctrico (bajo y guitarra eléctricos y set de batería completo), donde pudimos ver cómo los músicos se desenvolvían de manera más cómoda. Comenzaron con la vitaminada “I will live on islands” con la que llenaron de luz y buenas vibraciones las tablas de la sala.

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Centrándose mayoritariamente en composiciones de su último álbum de estudio “Hapiness waltz”, sonaron temas de refinada estética soul como “It’s good to have you” o “Come back”, donde los trabajados coros de Xema y Cayo terminaron de definir las bonitas construcciones de Josh. El pop insignia del estadounidense, clásico, cálido y exquisito, brilló en temas como “A lot like magic” o “Simple pleasures” y Josh se despidió de nosotros con la recién galardonada con un premio Goya “Do you really want to be in love?”. Cuando salía del concierto, policías de servicio veían el fútbol. En bares. Debajo de mi casa. Y de la tuya.

Pero el hombre entrañable de sombrero fue el único capaz de salvar el partido.

Texto María Mieres.
Fotografía Nacho Iglesias.
05-05-2014
Conciertos, Música